Each individual has different genetic and treatment-related factors that may make an inhibitor more or less likely. Those factors usually don’t stand alone and can be impacted by other aspects. These are some of the known factors:
Inhibitors occur in 1 out of 10 people with hemophilia A, whereas they happen in 3 out of 100 people with hemophilia B. Therefore, it is more likely for you to develop an inhibitor if you have hemophilia A. While some people with type 3 VWD get an inhibitor, it is substantially less likely to happen than in people with hemophilia A or B.
People with a severe level of their bleeding disorder are more likely to develop an inhibitor than people with a moderate or mild level of severity. Often, people with severe hemophilia will infuse more frequently, especially once they are starting prophylaxis, which increases the exposure to factor replacement products.
People who are black/African American are more likely to develop an inhibitor than people who are white. People who are Asian are more likely to develop an inhibitor than people who are white, but less likely than people who are black/African American. This is possibly due to the genetic mutation causing the bleeding disorder and treatment-related factors.
People who are of Hispanic ethnicity are more likely to develop an inhibitor than people who are non-Hispanic. This is possibly due to the genetic mutation causing the bleeding disorder and treatment-related factors.
People who have a blood relative with a bleeding disorder and inhibitor are more likely to develop an inhibitor themselves in comparison to people, who do not have a blood relative with a bleeding disorder and inhibitor. This is possibly due to the genetic mutation causing the bleeding disorder.
Some inheritable bleeding disorders are caused by variations in genes. For people with hemophilia A, people with certain genetic variations appear to be more prone to develop an inhibitor in comparison to others. A person with hemophilia A caused by a large deletion genetic variation (removal of an entire gene, several genes, or a section of the chromosome) is more likely to develop an inhibitor than a somebody with a nonsense genetic variation (change in one DNA part leading to an early signal to stop building a protein). On the other hand, a person with a missense genetic variation (change in one DNA part leading to the wrong amino acid being included in the protein) is less likely to develop an inhibitor than a person with a nonsense genetic variation.
The impact of genetic variations on the development of inhibitors in other bleeding disorders is currently unclear.
For more information about genetic mutations, please visit the National Human Genome Research Institute.
Most often inhibitors develop during the first 50 treatments with clotting factor replacement products. During this time it is more likely for your body to see the treatment as a foreign body, which will lead to the inhibitor response. The likelihood of developing an inhibitor decreases with the number of infusions. After 150 infusions it is substantially less likely that a person would develop an inhibitor, but it can still happen. Also, people with a high frequency of factor replacement infusions, for example in response to surgery, are at a higher risk of inhibitor development than people who are on a standard prophylaxis treatment regime.
Si se infunde productos de factor de coagulación de reemplazo, usted podría presentar un inhibidor. Los proveedores de atención médica no están completamente seguros de por qué ocurre esto, pero saben que ciertas personas tienen más probabilidades de presentar un inhibidor que otras.
Cada persona tiene diferentes factores genéticos y relacionados con su tratamiento que podrían hacer más o menos probable que presentara un inhibidor. Estos factores generalmente no son independientes y podrían verse afectados por otros aspectos. Los siguientes son algunos de los factores conocidos:
Los inhibidores se presentan en 1 de cada 10 personas con hemofilia A, y ocurren en 3 de cada 100 personas con hemofilia B. Por tanto, es más probable que usted presentara un inhibidor si tuviera hemofilia A. Si bien algunas personas con el tipo 3 de la EVW presentan un inhibidor, es considerablemente menos probable que suceda que en personas con hemofilia A o B.
Las personas cuyo trastorno hemorrágico es grave tienen más probabilidades de presentar un inhibidor que las personas cuyo trastorno hemorrágico es moderado o leve. A menudo, las personas con hemofilia grave se infundirán más frecuentemente, particularmente cuando inician el tratamiento profiláctico, lo cual incrementa su exposición a los productos de factor de reemplazo.
Las personas de raza negra/afroamericanas tienen más probabilidades de presentar un inhibidor que las personas blancas. Las personas asiáticas tienen más probabilidades de presentar un inhibidor que las personas blancas, pero menos probabilidades que las personas de raza negra/afroamericanas. Esto posiblemente se deba a la mutación genética que causa el trastorno hemorrágico y a factores relacionados con el tratamiento.
Las personas de etnicidad hispana tienen más probabilidades de presentar un inhibidor que las personas no hispanas. Esto posiblemente se deba a la mutación genética que causa el trastorno hemorrágico y a factores relacionados con el tratamiento.
Las personas que tienen un pariente consanguíneo con un trastorno hemorrágico y con un inhibidor tienen más probabilidades de presentar un inhibidor, en comparación con personas que no tienen un pariente consanguíneo con un trastorno hemorrágico y un inhibidor. Esto posiblemente se deba a la mutación genética que causa el trastorno hemorrágico.
Algunos trastornos hemorrágicos hereditarios son causados por variaciones en los genes. En el caso de personas con hemofilia A, las personas con determinadas variaciones genéticas parecen más susceptibles a presentar un inhibidor en comparación con otras. Una persona con hemofilia A causada por una variación genética de deleción importante (eliminación de un gene entero, de varios genes o de una sección del cromosoma) tiene más probabilidades de presentar un inhibidor que una persona con una variación genética de terminación prematura (cambio en una parte del ADN que provoca una señal temprana para detener la síntesis de una proteína). Por otro lado, una persona con una variación genética de cambio de aminoácido (cambio en una parte del ADN que provoca la inclusión del aminoácido equivocado en la proteína) tiene menos probabilidades de presentar un inhibidor que una persona con una variación genética de terminación prematura.
Actualmente no está claro el impacto de las variaciones genéticas en la aparición de inhibidores en otros trastornos hemorrágicos.
Si desea obtener más información sobre mutaciones genéticas visite la página del Instituto Nacional de Investigación del Genoma Humano.
La mayoría de las veces, los inhibidores se presentan durante los primeros 50 tratamientos con productos de factor de coagulación de reemplazo. Durante este tiempo es más probable que el cuerpo perciba al tratamiento como un objeto extraño, lo que provocará la respuesta inhibidora. La probabilidad de presentar un inhibidor disminuye con el número de infusiones. Después de 150 infusiones es considerablemente menos probable que una persona presente un inhibidor, pero aún podría suceder. Además, las personas con una frecuencia elevada de infusiones de factor de reemplazo, por ejemplo, como resultado de una cirugía, corren un mayor riesgo de presentar inhibidores que las personas que siguen un régimen de tratamiento profiláctico habitual.